Por Luis Sexto
El rechinar del cordaje y los palos se ampliaba como el único sonido bajo la comba de aquellos parajes nunca oídos, ni vistos por europeos. Tres carabelas se mecían lánguidamente sobre las aguas calientes de la ensenada que bautizarán luego de Cortés. A pesar de que las faenas menos urgentes de abordo habían recesado, la marinería sudaba. Y desde la baranda de estribor, algunos hombres deseosos de sombra y aire fresco observaban por sobre el azul, que hería como un espejo, la línea verde y suculenta de la costa. No hablaban tratando de oír algo más que no fuese el ruido metálico que saltaba como un insecto unánime del monte desconocido que enfrente los tentaba. ¿Será una ísola? A qué habrán llegado hasta estas tierras tan emparentadas con el averno por sus calores, si el Almirante ha decido orzar y enrumbar hacia el sur franco donde sólo Dios sabe qué habrían de hallar.
Los comentarios quedaban en la oscuridad de las bodegas secretas de la marinería, recatándose de los vapores del mundo viejo que trajo a estos países las máculas del pecado original. El notario real iba registrando, de boca en boca, una declaración cuyos términos se repetían exactamente: Cuba no es una isla. Porque jamás nuestros oídos se han enterado de que halla en este mundo un ísola con tanta longitud de más de 335 leguas de oriente a occidente...
El almirante, en la nao capitana, sonreía guardando los dientes. Había decidido no continuar costeando el litoral del sur. Ignoraba exactamente que unas 20 leguas hacia occidente toparía con el punto final de esta tierra que huele tan dulcemente. Pero ya sabía que no era una península asiática y que después de Cuba no aparecerá la India. Le interesaba, sin embargo, por razones de alto mando -que ahora el cronista no se entretendrá en enumerar- hacer creer que la geografía no es la que es, sino la que el Descubridor, en su segundo viaje, quería que fuese. En todo su tiempo, él había visto y puesto estudio en todas las escrituras, cosmografías, historias, crónicas y filosofía y de otras artes. Y por ende la misión que Dios le había mandado no podía reparar en torceduras de la verdad y en melindres de conciencia, si deseaba rescatar almas y hallar oro con que comprar hasta el Paraíso. Hijos somos de lo feble; nadie calla, si no se les asoma la necesidad de conservar en cofres lo sabido….
Casi dos años antes, cuando el navegar se hacía largo, casi sin fin, y la fe en el Almirante se perdía en aquel primer viaje, la tripulación le eran adversa, y un Colón manso, aparentemente sometido, congregó a sus oficiales y los nombró responsables de la decisión de seguir con la proa puesta hacia el occidente o hacer girar la flota casi media esfera. Solo restaban seis días para avistar tierra aquel 6 de octubre del año del Señor de 1492.
-¿Capitanes, qué haremos que mi gente mal me aqueja? ¿Qué vos parece, señores, que fagamos?
Vicente Yáñez habló:
-Andemos, señor, hasta dos mil leguas, e si aquí no hallaremos lo que vamos a buscar, de allí podremos dar vuelta.
Hoy, 12 de junio de 1494, la tripulación aceptó admitir cuanto Colón exigía. Saber, en verdad, los marineros y otros tripulantes no sabían, intuían tal vez, aunque Juan de la Cosa, el cartógrafo, asintió en la maroma del que calla, y promete, para sí mismo, soltarlo algún día cuando Dios provea el momento.
Todos por ahora mantendrán calladas sus dudas, o sus ciencias, porque el capitán mandaba y la marinería obedecía por real pragmática, y si no fuese así, el bellaco que se atreviere a negarlo luego de haber firmado el acta, será sometido a una multa de diez maravedíes y, sobre todo, a nunca más hablar palabra de cristiano, pues la lengua, ese instrumento de tantas tentaciones malignas, le sería cortada…
(Del libro en preparación Historias de bolsillo (Anécdotas cubanas)
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1 comentario:
Luis Sexto, cuando yo me quejo de la aduana en Cuba, e incluso del robo en los maletines durante los vuelos nacionales es porque ya es alarmante y esto afecta al pais, sobre todo si tenemos que enfrentar una oleada de turistas noreamericanos que esos si no tienen pelos en la lengua a la hora de quejarse. Los que violan las regulaciones no pueden ser esgrimidos para ocultar la verdad sobre la falta de proteccion juridica del viajero ante este problema y sobre todo del viajero cubanoamericano porque se de norteamericanas que viajan a Cuba con dos grandes maletas para regalar de todo a quienes quieran y nadie las revisa, es decir, el marco juridico se perdio,incluso estando en Cuba aviones compoletos no eran revisados procedentes de europa y entraban de todo, es " a lo que entiendan los de arriba" y asi, no llegamos a Penjamo, siempre andaremos en el pais de Jauja, ese es un problema que hay que meterle mano, ya, a mi concepto, y ver que se hace porque se ha convertido en un relajo bajo el amparo y pretexto de no dejar pasar determinados articulos electronicos para que la gente no vea cosas que ven de todas maneras por videos que entran los propios funcionarios cubanos para sus familias y se esparcen por campos y ciudades en comptencia franca con el ICRT, porque de lo que si estoy seguro es que ellos si ven esos programas que quieren que la poblacion no vea, y eso lo vivi viviendo en Cuba, esa doble moral. Aqui los americanos le dicen "Guatemala" a ese tipo de siuaciones donde cada cual hace lo que le viene en gana con la moral en calzoncillos.
Por otra parte, ya los turistas rusos que querian ir a Cuba estan viniendo a Sarasota. Ellos, jovenes rusos, me dicen que desean con toda el alma ir a Cuba, adoran a Cuba, pero que ir a Cuba es muy caro y que aqui en Sarasota, todo les sale mas barato.Yo no se si se podra, pero es mi criterio que deberia haber una politica de precio con el mercado turistico ruso como la hubo un tiempo con el canandiense debido a que existe en ese pais una verdadera voluntad de visitar Cuba por parte de jovenes, la mayoria recien graduados universitarios y son miles de miles con gran cultura y educacion, pienso que ese turismo ruso es altamente beneficioso porque abre un puente de futuras opciones que se ampliarian considerablemente como fuente de inercambio academico, cientifico, ingeniero, negocios e inversiones si consideramos que con Estados Unidos siempre va a haber problemas, aun con relaciones diplomaticas en cuanto a niveles academicos, transferencia de tecnologias y en los niveles informaticos debido a regulaciones proteccionistas a que estan sujetos los cientificos y academicos norteamericanos, salvo con Canada, Japon y Alemania, y para de contar, o sea tienen vida limitada aun con politica de puertas abiertas.En el area America solo abren con Canada y para de contar. Rusia compensaria ese problema y considero estrategico y politico discutir el problema del precio en el turismo ruso que ha descendido notablemente, un once por ciento por el problema del precio. Hasta mas ver,afectos y saludos a todos en el periodico.Ademas, yo le daria un trato de VP y over 1, a todo academico o cientifico con opciones preferenciales y descuentos, por area, como norma automatica en el buro de turismo. Gualterio.
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